miércoles, 19 de febrero de 2014

Templos, Júpiter y el Emperador

   Nuestro pasado romano ya lo tenemos claro, son muchos los vestigios físicos que nos dejaron, y aunque tardando en el tiempo y por esto, hemos perdido tantas recuperaciones de valor incalculable, al menos intentemos disfrutar y conservar para nosotros y las siguientes generaciones las aportaciones rescatadas, aunque solo sea en parte, nos confieren y aportan información sobre lo que somos por lo que fuimos.

   El centro principal de Caesaróbriga en todas sus generaciones ha sido nuestra actual plaza del pan, foro para los romanos, y es en ese foro donde nos encontramos con una o dos, depende de lo que prefiramos disfrutar, pues de una se construyó la otra y ésta con la primera, una domus,  la mas antigua, casa de un comerciante, como no podía ser de otra forma, en medio del foro, donde todo el bullicio y ansias de adquirir productos, llevaba a la algarabía y regateo, tratos para conseguir el mejor producto, al mejor precio, y comentarios de lo sucedido en éste o aquel lugar, disfrute de las nuevas telas  traídas de oriente, y el olor de las especias, mezclado con las noticias de nuevas conquistas al paso de un escuadrón de las centurias romanas, ataviados con sus parapetos de cuero, sus escudos, espadas del noble metal de Hispania y sus capas rojas, protectoras del frío e insignia de valentía.

    Y a la pérdida del interés en el producto, o la caída en desgracia del comerciante propietario, a la vez del crecimiento de la ciudad, homogeneidad en cultos y restructuración de trazado, o simplemente aprovechamiento del lugar y materiales para la ocasión, se construyeron dos templos, contiguos, uno de culto muy probable al emperador, en la antigua Roma, se les rendía culto al fallecer, aunque su comportamiento no hubiese sido el esperado en una deidad, el culto al máximo regente, lo sabemos pues se ha encontrado la lápida de Domitia Proculina, flamicia, esto es, sacerdotisa encargada del templo dedicado al emperador, que vivió y se ocupó posiblemente del profesado a  Vespasiano en ese momento, hasta su muerte.  
   El otro templo, a Júpiter, Dios de la luz, protector de la ciudad y del estado romano, de el provienen las leyes, y el orden, imagino los dos templos juntos, así el emperador puede relajarse en caprichos mundanos, pues es Júpiter quien se encarga de que todo funcione como debe, y si algo va mal, pues el gran Dios, !!estos emperadores pensaban en todo!!, las vestales, ataviadas de sus túnicas del color de la pureza y con sus cabellos medio recogidos en juveniles peinados, danzaban en ritos sagrados, dejando rienda suelta a la imaginación de los supremos emperadores y dioses en sus alturas, y resto de observantes mas reales y terrenales. 

   Así con estos pensamientos podemos pasearnos por estas excavaciones recuperadas y expuestas en el Centro Cultural Rafael Morales, que con un poco de ingenio y ganas añadidas, nos transportaran a la época romana en su mas sagrada representación.   Ya una vez allí, el sábado podemos disfrutar de un taller en familia, de fotografía, niños de 7 a 15 años, y sus papás, a las 17:30h. no tendremos excusa, tras aprender a fotografiar, en pasarnos por los templos y traernos unas instantáneas del sagrado lugar, y continuar fotografiando en la ruta teatralizada por el casco antiguo, para conocer los diferentes personajes de nuestra ciudad, salida a las 20h. de la puerta Sevilla. El domingo 23 a las 19:30h. en el Teatro Palenque, Yllana con la obra 666. Múltiples actividades para complacer a todos los gustos.

Hasta el próximo post

Katia C.


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